Un partido de la NBA ha puesto en suspenso el juicio en Estados Unidos contra Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México. El juez Brian Cogan ha suspendido la audiencia prevista para este jueves porque uno de los miembros del jurado solicitó ausentarse para ir a ver el partido entre los New York Knicks y los Boston Celtics. El hombre, uno de los más de 400 ciudadanos que fueron sorteados para participar en el proceso judicial, explicó desde que comenzó el proceso de selección que le era imposible cancelar el viaje. La concesión, aceptada por la Fiscalía y la defensa, es un reflejo de las dificultades encontradas para encontrar a las 12 personas que decidirán si el acusado es culpable o inocente de los cargos que se le imputan, así como a sus seis sustitutos. .
Al ser un caso de drogas de alto perfil, la corte de Brooklyn decidió no hacer públicas las identidades de los miembros del jurado. El miembro que pidió ausentarse es un hombre de mediana edad que ya había participado como jurado en otro juicio, pero no pudo dar un veredicto porque en esa ocasión las partes llegaron a un acuerdo. De las entrevistas que le realizaron la semana pasada se sabe que el ciudadano tiene amigos en las fuerzas del orden y que su hermano tuvo un problema de adicción a las drogas cuando era estudiante. En el proceso de elección de los miembros, se hicieron muchas preguntas sobre la posición de los candidatos frente a las corporaciones de seguridad y su confianza en las instituciones de justicia. García Luna, después de todo, era jefe de la Policía Federal en México. También dijo que había oído hablar de Joaquín El Chapo Guzmán y que “su novia lo había ayudado a escapar” de la cárcel. “Eso es prácticamente todo lo que sé”, comentó. El exfuncionario está acusado de colaborar con el Cártel de Sinaloa.
La gran mayoría de los candidatos pidieron excusarse de participar en el jurado. Para muchos significó un gran sacrificio porque iban a dejar de pagar sus trabajos. Esa fue la razón más común. La corte del Distrito Este de Nueva York da un pago de 50 dólares diarios a los seleccionados y además cubre los gastos de transporte y estacionamiento. La suma, sin embargo, sigue siendo simbólica en una de las ciudades más caras del mundo. Se necesitaron tres sesiones y más de 20 horas de deliberación para concluir esa parte del juicio.
El hombre explicó en ese momento que era fanático del baloncesto. César de Castro, abogado de García Luna, se tomó un tiempo para bromear durante la entrevista y pedirle a Peggy Kuo, la magistrada a cargo del proceso, que le preguntara a qué equipo iba a apoyar. Al final, ella no respondió. El partido entre los Celtics y los Knicks se jugará por la tarde en el estadio TD Garden de Boston. Es una de las rivalidades más antiguas de la NBA.
corte de caja
La primera semana de interrogatorios se cerró con los primeros ocho testigos llamados a declarar por la Fiscalía. El primero fue Sergio Villarreal Barragán El Grande, ex alto mando del Cártel de los Beltrán Leyva, quien aseguró que García Luna tenía un esquema corrupto para recibir sobornos del narcotráfico. Ha sido el testimonio más explosivo. El segundo fue Tirso Martínez, un capo de rango medio que trabajó para el Cártel de Sinaloa y quien explicó cómo funcionan las organizaciones criminales en México y Estados Unidos. Cinco más fueron agentes estadounidenses -policías, agentes antinarcóticos, empleados de aduanas y migración- que corroboraron algunos episodios de la historia de Martínez. Por último, Héctor Tolentino, narcotraficante de origen dominicano, se presentó y explicó cómo se vende la droga en las calles de Nueva York.
Aunque solo el testimonio de El Grande tiene relación directa con el caso, la fiscalía basó su estrategia en explicar a los jurados los delitos de tráfico de cocaína que se le imputan a García Luna. El exfuncionario está acusado de transportar, distribuir y vender drogas desde México en Estados Unidos. Las historias de El Grande, Martínez y Tolentino ilustran en qué consisten estos cargos y cuál es el impacto que tienen en Nueva York. También es una forma de justificar que el exfuncionario sea juzgado en este país, a pesar de que la mayoría de las acusaciones supuestamente tuvieron lugar en México. Los testimonios de los agentes pretenden dar mayor credibilidad a las declaraciones de testigos cooperantes, convictos y exconvictos que acceden a colaborar con las autoridades a cambio de beneficios específicos, como visas o reducción de sentencias.
El juez Cogan no celebra audiencias los viernes. Será hasta el próximo lunes cuando se reanude el juicio con sesiones diarias hasta el jueves, salvo que surja algún otro problema.
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