Las fuertes lluvias que cayeron este fin de semana en Suiza, Francia e Italia dejaron al menos siete muertos, según las autoridades locales.
En la región de Aube, en el noreste de Francia, tres personas de unos 70 años murieron el sábado por la noche cuando un árbol cayó sobre el coche en el que viajaban debido a los fuertes vientos. Un cuarto pasajero se encuentra en estado crítico, dijeron a la AFP las autoridades locales.
Al menos cuatro personas han muerto en Suiza y otra sigue desaparecida. Tres de ellos murieron en un deslizamiento de tierra provocado por las lluvias torrenciales en el sureste del país, informó la policía cantonal del Tesino.
Los equipos de rescate encontraron los cuerpos de dos personas en la región de Fontana, cuya identificación está en proceso. Según el periódico local ‘La Regione’, las víctimas son dos mujeres suizas que se encontraban de vacaciones en la región.
Además, un hombre fue encontrado muerto en un hotel de Saas-Grund, en el cantón suroeste de Wallis. La policía dijo que probablemente le sorprendió el rápido aumento del nivel del agua.
Desde el sábado, gran parte de Suiza se ha visto afectada por violentas tormentas y fuertes lluvias. En el suroeste, las inundaciones del río Ródano y sus afluentes debido a las lluvias torrenciales y al deshielo obligaron a la evacuación de varios cientos de personas y al cierre de muchas carreteras.
Las autoridades de varios cantones decidieron cancelar el sábado todos los eventos al aire libre, impidiendo a miles de aficionados de la selección suiza celebrar la victoria sobre Italia (2-0) en la Eurocopa.
Italia, sin víctimas
En el norte de Italia, en las regiones de Piamonte y Valle de Aosta, también se han producido inundaciones, pero hasta el momento no se han registrado víctimas.
Los bomberos de Piedmont dijeron el domingo por la mañana que habían realizado 80 llamadas para ayudar a la gente. En el Valle de Aosta, un deslizamiento de tierra bloqueó temporalmente la carretera de acceso regional a la turística Cervinia. El torrente causó importantes daños en el centro de la ciudad, donde varios comercios quedaron inundados.