La casa de Vicente Aleixandre, el célebre poeta y premio Nobel de Literatura en 1977, conocida como Velintonia, está a punto de ser adquirida por la Comunidad de Madrid en un contexto complicado por su deterioro y los enfrentamientos entre los herederos del escritor. Tras años de abandono, disputas familiares y falta de consenso entre las administraciones públicas, finalmente la Comunidad de Madrid se ha decidido a pujar por la propiedad, logrando que en la tercera subasta la oferta más alta fuera de 3.193.225 euros. Aunque el Ministerio de Cultura había mostrado interés, no presentó ninguna oferta, dejando el camino libre a la administración regional que ahora tiene planes de convertir la casa en un centro cultural dedicado a la poesía, de cara al centenario de la generación del 27.
Velintonia es conocida no solo por ser la residencia de Aleixandre, sino también por haber sido un punto de reunión para muchas figuras importantes de la literatura en España. Esta casa, construida a finales de los años 1920, está en un estado de conservación bastante precario, lo cual ha generado inquietud tanto entre los descendientes como entre las autoridades. Desde que el poeta falleció en 1984 y su hermana murió dos años después, la vivienda ha estado bajo el control de su familia, quienes han encontrado dificultades para administrarla. Con el tiempo, diferentes administraciones han mostrado interés en su preservación, pero las disputas entre los herederos y la falta de medidas por parte de las autoridades han empeorado la situación.
Este conflicto ha sido complicado. En años recientes, el Ministerio de Cultura y el Ayuntamiento de Madrid intentaron adquirir la propiedad sin éxito, debido a complicaciones jurídicas y económicas, los convenios no se materializaron. En una subasta previa, la Comunidad de Madrid pensó que había adquirido la casa, pero una objeción de la propietaria mayoritaria lo impidió. Ahora, parece que la situación se ha clarificado y la Comunidad ha conseguido la propiedad, al ser el único postor.
El ejecutivo regional ha evidenciado un firme compromiso con la conservación del legado cultural y ha resaltado la relevancia de la vivienda para el recuerdo literario nacional. De acuerdo con las palabras del consejero de Cultura de la Comunidad de Madrid, la meta es transformar Velintonia en la Casa de la Poesía, un centro cultural que rendirá tributo no solo a Aleixandre, sino igualmente a toda la generación del 27, uno de los grupos más influyentes en la historia de la literatura de España.
Por su parte, los herederos de Aleixandre han mostrado cierto malestar con el proceso, ya que deseaban una venta directa y han expresado su frustración por el largo tiempo que ha tomado la venta y la falta de colaboración de las administraciones. Aunque la Comunidad de Madrid ha sido criticada por algunos por no haber actuado con más rapidez en la compra, se reconoce el esfuerzo por salvar la casa de un autor tan relevante para la cultura española.
El destino de Velintonia recae actualmente en la Comunidad de Madrid, que ha asumido el compromiso de llevar a cabo una remodelación destinada a recuperar parte del brillo que la casa tenía en el pasado. Se presenta así la ocasión de fortalecer un sitio emblemático para la literatura en Madrid, que no solo preservará el legado de Vicente Aleixandre, sino que también se transformará en un punto cultural importante para las generaciones venideras, promoviendo la poesía entre la población.
El proceso de restauración, sin embargo, no será sencillo ni barato. A pesar de que se prevé una inversión significativa para su rehabilitación, el impacto cultural y simbólico de la conversión de Velintonia en un centro de la poesía justifica, según las autoridades regionales, el esfuerzo y los recursos invertidos. La Casa de la Poesía podría convertirse en un proyecto emblemático dentro de las celebraciones del centenario de la generación del 27, un evento que se anticipa como un momento crucial para la reflexión sobre la literatura y la cultura española en el siglo XX.