En muchas empresas, los empleados comparten un miedo común: la sensación de que no son valorados, que sus sugerencias son ignoradas y que sus oportunidades de crecimiento están bloqueadas. Este fenómeno, conocido como victimización en el lugar de trabajo, no sólo afecta la moral y las percepciones de los empleados, sino que también tiene graves implicaciones para la productividad y la cultura organizacional.
La victimización en el trabajo se refiere a una actitud o comportamiento donde una persona se percibe a sí misma como víctima constante de circunstancias negativas o injustas en el ambiente laboral.
Rocío Díaz, directora general y fundadora de ABUNDANTE by Planning Mística, explica que la victimización se produce cuando los empleados no se responsabilizan de sus circunstancias y culpan a sus superiores, compañeros u otros departamentos, centrándose en los aspectos negativos y anticipándose al fracaso.
Señales de victimización en el trabajo
Según Díaz, existen señales claras que pueden indicar la presencia de victimización entre los empleados:
- Evite asumir responsabilidades y culpar a los demás.
- Reaccionar negativamente y a la defensiva ante las críticas.
- Creer en teorías de conspiración en su contra.
- Exagerar los problemas para beneficio personal.
- Sentirse constantemente influenciado por la incompetencia o descuido de los compañeros.
Aunque algunas empresas pueden descuidar el bienestar de sus empleados, la victimización en el lugar de trabajo no siempre es un resultado directo de estas prácticas. Sin embargo, su presencia crea un ambiente tenso que afecta negativamente el desempeño y el bienestar emocional de los empleados, contribuyendo al estrés, la depresión e incluso el ausentismo.
Estrategias para abordar la victimización en el trabajo
Para abordar la victimización en el lugar de trabajo, Díaz sugiere que los líderes empresariales reconozcan su existencia como un primer paso fundamental para la mejora organizacional. Se recomienda realizar un diagnóstico detallado de la cultura laboral, identificar puntos críticos a través de observación y preguntas personalizadas. Esta intervención busca revertir el ciclo de victimización y transformar el problema en una oportunidad para mejorar la cohesión y la productividad del equipo.
Recomendaciones para evitar la victimización en el trabajo:
- Fomentar una cultura de responsabilidad: Los empleados necesitan sentir que controlan su trabajo y su impacto en la empresa. Esto se logra delegando responsabilidades y brindando oportunidades para la toma de decisiones. Un sentido de propiedad y pertenencia ayuda a los empleados a sentirse valorados y motivados.
- Implementar programas de capacitación y desarrollo.: Ofrecer programas de formación continua no sólo mejora las habilidades técnicas de los empleados, sino que también desarrolla resiliencia y habilidades de resolución de problemas. Al hacer que los empleados se sientan competentes, es menos probable que adopten una mentalidad de víctima.
- Crear canales abiertos de comunicación.: La comunicación clara y abierta reduce la incertidumbre y los malentendidos que pueden contribuir a la victimización. Fomentar una cultura en la que se valoren las opiniones y se aborden las inquietudes de manera constructiva ayuda a los empleados a sentirse escuchados y respetados.
- Promover la resiliencia: Proporcionar recursos y apoyo para gestionar el estrés y desarrollar la resiliencia ayuda a los empleados a afrontar los desafíos con una mentalidad positiva. Los talleres y programas destinados a desarrollar su mente y ampliar su perspectiva pueden resultar útiles.
- Desarrollar un liderazgo inspirador: Los líderes que sirven como modelos a seguir y demuestran cómo superar desafíos y adoptar una mentalidad positiva pueden inspirar a sus equipos a hacer lo mismo. El liderazgo motivacional puede cambiar la mentalidad colectiva de victimismo y convertirla en oportunidad.